Descubriendo mundo 2 (roll privado)

*jajaj, si dentro de unos dias tu, mi rey serás el consentido.*
Entonces los pequeños se acercaron y a la vez dijeron que su papa cumpliría años.
*si, y ese dia me asegurare de que te diviertas*

-Jaja, vaya, muchas gracias- dije- En ese caso, cuando llegue el tuyo tendré que ocuparme de que sea el mejor día de tu vida

En eso me levanté y la acaricié, al hacerlo me dolió la pata, pero no mostré ningún signo de ello, simplemente me acosté en la roca real.

-Bueno Simba, Kovu y Kion, ya regresaréis a casa otro día- dije

Ellos asintieron y me dijeron que no pasaba nada, ya que confiaban en Nala y Kiara, y Kion en su guardia del león.

-Por cierto, quería preguntarte una cosa Simba- dije- De rey a rey de reyes

Él asintió y me dijo que le preguntara.

-Bien, mi pregunta es ¿cuándo será la reunión de reyes?- dije

En eso Simba se sorprendió, señal de que no se acordaba de la reunión de reyes y se llevó la pata a la cabeza, luego me pidió disculpas y se puso a recordar cuando era la fecha. Al cabo de un rato dijo que ese año la reunión sería mañana en Grasslands.

-Simba, anda que me avisas con tiempo- dije- Vaya un rey de reyes, pienso pedir tu dimisión

Él me volvió a pedir disculpas y yo le dije que no pasaba nada.

-No te preocupes, con dos días me será tiempo suficiente para llegar a Grasslands- dije- ¿Este año se van a aceptar a nuestras esposas o no?

Él negó con la cabeza, solo tenían la entrada permitida las reinas de los reinos en donde la reina era más importante que el rey, en esos casos iba la reina en lugar del rey, pero no había más excepciones.

-Es una lástima, me hubiera gustado que Leiza viniera también- dije

Simba me comprendió, pero me dijo que era imposible.

-Bueno, oye Simba, ya que es dentro de dos días, ¿por qué no nos vamos juntos?, que Kion y Kovu regresen mañana a Pride Lands mientras que tú y yo nos vamos a Grasslands- dije

En eso me dijo que no era una mala idea y yo asentí.

Bueno a el le gusto la ide debo pensar en algo, quiero hacerlo el leon mas feliz de todo el reino.
Asi que me puse a pensar que seria bueno. Entonces los niños se me acercaron diciendo muchas ideas para darle el mejor a su papa
*le aremos algo pero es sorpresa, no pueden decir nada*

En eso vi a Leiza y a los niños reunidos, iba a levantarme, pero la pata me lo impidió, así que desde donde estaba echado les hablé.

-¿Qué os traéis entre patas?- pregunté arqueando una ceja

En eso Simba me dijo que era un secreto, ya no volví a preguntar.

-Bueno, vale, perdón por preguntar- dije- Por cierto, a partir de mañana y hasta dentro de un par de días no me vais a tener por aquí, así que portaros bien y hacedle caso a vuestra madre
-Oye suegro, te dejo al mando- dije guiñándole un ojo

Él asintió y me dijo que no me preocupara, que se iba a encargar de que el reino saliera adelante sin mí esos días, yo se lo agradecí. De repente vi una sombra en la entrada de la cueva y me alegré al ver que era Sarah, ésta los saludó a todos y fue directa a por mí, pues me iba a curar la pata.

Respire aliviada de que llegara sarah y me acerque a shiro
*que bueno que llegaste sarah*
Le regale una sonrisa y acaricie la mmelena de shirl

Leiza me acarició la melena y yo la acaricié a ella, en eso Sarah se puso a curarme, al acabar me dijo que era un corte y yo me puse a pensar en qué momento me lo podría haber hecho, pero no se me ocurrió nada.

-Muchas gracias Sarah- dije sonriendo

Ella dijo que no era para tanto, también me informó de que el hoyo que había aparecido se había convertido en un lago, ya estaba todo lleno de agua.

-Bueno, ese es el designio de la madre naturaleza- dije- Oye Sarah, ¿por qué no te quedas?, debe ser molesto regresar a tu casa con la que está cayendo

Ella se lo pensó y al final aceptó mi propuesta, yo sonreí, es que era lo mejor.

-Bueno, vayamos a dormir- dije- Que mañana nos espera un día muy largo, ¿verdad Simba?

Simba asintió, mientras que mi hijo se me quedó mirando con cara rara, lo que hizo que me riera.

-Como ahora hay dos Simba te has pensado que te lo decía a ti, ¿verdad hijo mío?- dije

Él asintió, yo me volví a reír, le pasé una pata por encima y me lo acerqué.

-No te preocupes por eso- dije- Y a dormir

Nos fuimos a dormir en toda la noche no pude dormir algo no me dejaba desperte y vi que seguia lloviendo por lo que me levante y sali queria que la lluvia me bañara estaba tan a gusto que no queria meterme pero algo me sorprendio

A media noche me desvelé, tenía la boca seca y me dispuse a ir a beber agua, al levantarme noté un pinchazo, pero ya está, no me volvió a doler la pata, caminé lentamente y vi a Leiza mojándose allá afuera, en eso me acerqué sin hacer mucho ruido y la besé, en eso noté que se sorprendió.

-¿Te sorprendí?, jaja- dije riéndome
-Dime, ¿qué haces aquí afuera?- dije

Y me quedé embelesado mirando aquellos hermosos ojos azules mientras esperaba su respuesta.

-Yo voy a beber agua, ¿me acompañas y por el camino me dices qué es lo que te ha desvelado a ti?- dije

Me sorprendí cuando llego de sorpresa y me beso lo mire y se lo regrese
*claro, te acompaño*

Dije y nos pusimos a caminar directo al lago, entonces decidi contestar a su pregunta

*bueno veras... La verdad no se por que no puedo dormir, hace rato me sentia como cuando era pequeña. Recuerdo que cuando llovía siempre ma la pasaba divirtiéndome cuando llovía, me gustaba correr bajo la lluvia saltar los charcos era muy divertido.*

En si no respondo a su pregunta pero la verdad solo me había despertado a convertirme. Otra ves en es pequeña a la que le gustaba jugar mientras llovia

-Entiendo, te gusta la lluvia, jeje- dije- Bueno, aunque seas una adulta, reina y madre, aún puedes hacer esas cosas si son las que te gustan, te acompañaría a saltar entre charcos, pero mejor lo dejo para cuando mi pata esté mejor

Tras decir eso la acaricié, cuando quisimos darnos cuenta ya habíamos llegado al lago y me dispuse a beber agua, una vez sacié mi sed me volteé para ver a Leiza.

-Anda, ve a correr bajo la lluvia y a saltar en los charcos, que yo te observo desde aquí- dije sonriendo

*que?, jajaj quieres que me transforma en una cachorra adulta?*
Me rei y la verdad que si queria ir a correr no me la pense dos veces y empeze a correr y ah salta en los charcos como una niña

Me reí al ver a Leiza corriendo y saltando, se notaba que lo disfrutaba, asi que yo también lo disfruté al ver aquella escena. De repente me volvió a doler la pata, así que empecé a caminar hacia Leiza.

*-Querida, será mejor regresar, no creo que esto sea bueno para mi pata y mañana me espera un largo viaje- dije*

Tras decir eso seguí caminando hacia la cueva real.

me lo pense a donde ira mañana , que sea tan importante

esta bien pero, a donde iras mañana?, que no me as puesto al corriente

dije mientras arqueaba una ceja y lo miraba

vamos dime

*-¿Acaso no prestabas atención?, bueno no importa, así hablamos más- dije mirándola- Mañana me voy con Simba, el rey, a Grasslands ya que dentro de dos días se va a llevar a cabo una reunión de reyes allí y como estoy lastimado de la pata, tardaré justo dos días en llegar*

Le dije todo eso en el camino de vuelta y justo cuando terminé de hablar ya estábamos en la cueva, entré, me sacudí y me eché en la roca real, no podía estar más tiempo levantado.

pues... te recuerdo que estaba cuidando a los niño, bueno hay que olvidar lo y vamos a dormir

después de decir eso sentí un mal presentimiento que yo deseaba que no pasara, por favor por mas que quiera que no se cumpla ese mal presentimiento, pensé. y cerré los ojos quedando dormida

Leiza se quedó dormida y yo hice lo mismo. Al día siguiente fue Simba quien me despertó temprano y me dijo que teníamos que marcharnos.

*-Espera a que por lo menos me despida- dije bostezando*

Él negó con la cabeza y dijo que teníamos que irnos ya, noe me gustó las prisas que me metió, pero accedí, le di un beso a Leiza y después a todos los demás. Al acabar me marché, caminaba despacio y apoyado en Simba.

*-Simba, ¿por qué tanta prisa?- dije*

En eso me dijo que como tenía la pta mala lo mejor era salir con tiempo, además había que aprovechar que ya no llovía para partir.

A la mañana siguiente me desperte y vi que shiro ya no estava ni simba asi que supuse que a lo mejor partieron. Me levante y sali todo parecia tranquilo mi padre salio por detrás y me dijo buenos dias mi princesita
*oh, buenos dias papá*
luego me pregunto que como habia amanecido?, si shiro ya había partido?, yo respondi a sus preguntas
*bien y si shiro ya partió, parece que madrugó*
Después mi papá se despidió de mi y se fue a vigilar el reino junto a zuzo

*-Lo entiendo, pero me hubiera gustado despedirme- dije*

Él volvió a negar con la cabeza y me dijo que si me hubiera despedido hubiéramos perdido un tiempo muy valioso, ya que teníamos que cruzar las montañas y para eso íbamos a tardar un día.

*-Está bien, está bien- dije- Tú ganas, por cierto, ¿podemos descansar?, empiezo a marearme y tengo hambre*

Simba roló los ojos y aceptó, en eso me dejó echado en el suelo, yo se lo agradecí y me dijo que iba a cazar. Al rato volvió con una gacela.

*-Simba, las manadas más cercanas creo que son ñues- dije*

En eso me dijo que detestaba a los ñues, yo me extrañé, pero luego recordé lo de la estampida y lo comprendí.

*-Bueno no importa, el caso es que has traido comida, así que a comer- dije relamiéndome*

Tras decir eso nos la comimos enseguida entre los dos y después decidimos dormir un poco. Al cabo de un rato me desperté, me levanté y bebí agua de un pequeño lago que allí había. A continuación desperté a Simba y los dos continuamos con nuestro viaje.

Después de que mi padre se haya marchado llego eril y se sento a mi lado le dije
*buenos dormilón, dormiste bien o te hace falta dormir*
El de rio y me dijo que estaba bien. De pronto a pareció ls pequeña nala
*hola pequeña*
Vi como ella estaba de modorrilla y fue a abrazar a au papa y dijo que me sorprendió ella dijo papi, y se lo a erik y yo lo mira con un rostro de felicidad.
*que bueno que hayas hecho las pases con ella*

A medio día hicimos otra parada, esta vez más larga, porque la pata empezaba a dolerme y tenía que reposar.

-Lamento ser un estorbo, Simba- dije triste

En eso Simba me dio un abrazo y me animó, también me dijo que nunca sería un estorbo para él y nos pusimos a recordar viejos tiempos.

-¿Te acuerdas de la primera vez que nos conocimos?- pregunté

Él asintió y me dijo que yo andaba vagando por mi propio reino, él me encontró y me llevó con él a ver a mi padre, éste al verme puso mala cara y le preguntó a Simba que por qué lo había recogido.

-Sí, y recuerdo que luego le dijiste que si él no lo quería me ibas a llevar contigo- dije- Y él aceptó que me llevaras contigo, pero solo por un limitado tiempo, ¿sabes Simba?, aquella temporada que pasé en Pride Lands fue uno de los mejores momentos de toda mi infancia, nadie me daba de lado, al contrario, logré hacer muchos amigos

Conseguí sonrojar al rey Simba y me dijo que él también se lo pasó muy bien conmigo en su reino, además de que cuidaba de sus hijos ya que yo era más grande que ellos.

-Jaja, sí, aunque luego me convencían para ir en busca de problemas y tú nos regañabas- dije riéndome
-Por cierto, ¿cuándo piensas ser abuelo?, que eres mucho más mayor que yo y he sido abuelo antes que tú- dije

En eso se rió y me dijo que no le faltaba mucho, ya que Kiara estaba embarazada.

-¿En serio?, podrías habérmelo dicho antes y así hubiera felicitado a Kovu- dije

Y me dijo que a los tres se les olvidó, ya que estaban muy concentrados en la pelea.

-Anda que..., ya os vale, menudas cabezas las vuestras- le regañé

Escogí a algunas leonas para ir a casar y buscamos y buscamos manada pero por mas que buscábamos no dábamos con ellas entonces vimos una de ñus y lia (una leona de la manada) me pregunto si aprovechábamos

*creo que si pues... No hay mucho de donde escoger, es muy extraño. Bueno vamos a por ella*

Les ordene y todas tomaron su puesto listas para atacar, después de unos minutos lo conseguimos, íbamos de camino a casa cuando empezo a hacer mucho aire y nos apuramos pero el aire solo empeoraba la situación
*vamos hay que llegar no falta mucho*

Estábamos descansando, cuando de repente sentimos que se levantaba aire.

-Mmm, que buena brisa- dije- Y encima viene fresquita, no sabes lo que se agradece después de bastante calor

Pero Simba no se alegró y me dijo que teníamos que buscar refugio ya, yo le miré extrañado ya que no lo comprendí.

-¿Por qué?, aquí se está muy bien- dije sonriendo

Él me rugió y me dijo que era una orden, hacía tiempo que no lo había visto tan enfadado y cuando lo hacía era porque corríamos peligro, así que asentí, me levanté y juntos fuimos a buscar refugio. De repente me di cuenta que el aire cada vez era más fuerte, pero por suerte a lo lejos las montañas, ya estábamos llegando a la frontera, pero cuanto más nos acercábamos más aire y más frío hacían. De la nada salió volando una roca que de no ser porque Simba me apartó casi me da de lleno y la roca no es que fuera pequeña que digamos.

-Simba, ¿qué está pasando?- dije empezando a preocuparme

En eso me contó que se acercaba un huracán y que teníamos que buscar refugio urgentemente o saldríamos volando, rápidamente asentí, me levanté y corrí como pude hacia la montaña. Pudimos divisar una cueva, así que corrimos hacia ella, pero justo antes de entrar cayó otra roca, por suerte logramos entrar, pero a mí me aplastó la pata derecha trasera y empecé a rugir del dolor, cosa que alertó a Simba e hizo que se preocupara. Intentó quitarme la roca de encima, pero no había manera, pesaba demasiado y él ya estaba algo viejo para esas cosas.

-Simba, por favor, quítame la roca de la pata- le supliqué con lágrimas en los ojos

Vimos como los arboles se sacudían muy fuerte
*rápido chicas, ya estoy muy cerca*
Justo cuando llegamos empezo a hacer mucho mas aire tan fuerte que parecia que la cueva iba a salir volando.
*nos se preocupen estaremos bien*

Simba seguía intentando quitarme la roca de encima, pero no lo conseguía, de repente se oyó un ruido muy fuerte al fondo de la cueva que nos sobresaltó a los dos. Se empezaron a oír pasos que se dirigían hacia nosotros, en eso le metí más prisa a Simba y éste siguió intentando quitármela, pero sin resultado. Desde el interior de la cueva apareció otro león, éste era más joven y más fuerte que nosotros dos y al vernos en ese estado se ofreció a ayudarnos. Entre Simba y él lograron levantar la roca, así que aproveché para sacar mi pata.

-Muchas gracias por ayudarnos- dije- Por cierto, ¿quién eres?

Él dijo que no hacía falta darle las gracias, que estaba encantado de ayudar a los demás y se llamaba Kawa.

-Un placer conocerte, de verdad, porque de lo contrario me hubiera visto atrapado ahí para siempre- dije- Oye, por casualidad no sabrás si esta cueva tiene otra salida, ¿verdad?, es que estamos de camino a Grasslands

En eso Kawa se sorprendió y dijo que él también iba a Grasslands, así que Simba le preguntó que si por casualidad no era rey y él dijo que sí, que era el rey de Desert Lands.

-Vaya, pues yo soy Shiro, rey de Mountain Lands- dije- Y él es Simba, rey de Pride Lands y rey de reyes

En eso dijo que el placer era suyo y se puso a hacer una reverencia a Simba, éste le dijo que para y le volvió a preguntar si había de alguna otra salida. Kawa se quedó pensando, al poco asintió y nos dijo que le siguiéramos, pero para mí era imposible levantarme, así que Simba me cargó.

Todos estamos preocupados entonces decidi hablar
*oigan que les parece si planeamos algo para shiro*
Los niños brincaron de alegria y entonces se pusieron a pensar le pueden hacer a su papá yo solo veo el aire que azotaba fuertemente los pasto y receba para que a shiro no le pasara nada y a simba