Descubriendo mundo (roll privado)

*-Me gustan esos nombre- dije*

La verdad es que estaba disfrutando mucho ese momento a solas con ella y encima me estaba acariciando la melena, mas a gusto no podía estar, pero sabía que teníamos que marcharnos, pues aún quedaba mucho reino por ver.

*-Cariño, se que estamos muy a gusto aquí, pero tenemos que seguir viendo el reino- dije- Ahora te voy a llevar al mejor sitio para cazar y te volveré a dar clases*

yo no quería marcharme estaba completamente a gusto con el, pero ya que, un reino conlleva una gran responsabilidad.

esta bien, vamos, antes de que anochezca


dije mientras salia del agua

Yo tampoco quería salir, pero tenía que hacerlo y más tras ver que ella salía, asi que sali y sacudí mi melena para secarla.

*-Bueno, ahora vamos a cazar- dije*

Tra decir eso la guié por el camino de vuelta, no tardamos mucho en salir, ahora caminamos al aire libre y enseguida llegamos a donde estaban los mejores pastos del reino.

*-Aquí vienen todas las especies del reino a comer, ya que los pastos de aquí son los mejores y al ser muy altos nos camuflamos mejor- dije- Ahora ve a practicar la caza, yo te estaré viendo y si estás en apuros te ayudaré*

Leiza me dijo que solo las iba a asustar porque de lo contrario habría problemas con en ciclo de la vida, yo asenti y ella se fue, mientras se acercaba un león macho las espantó porque saltó hacia mí, asi que me defendí y empezamos a luchar, ni siquiera oí a Leiza, estaba intentando no resultar herido en el combate.

shiro...no...corrí en su ayuda pero ese león se veia muy pero muy fuerte, yo vi que shiro estaba saliendo lastimado y débil, el león me vio decidí ir a buscar ayuda, pero el me acorralaba a cada paso que daba entonces le respondí...a golpes decidí luchar contra el, y con eso comprobé lo que había pensado antes era demasiado fuerte...estamos perdidos

Me dio un zarpazo que me tiro al suelo, cuando volvía abrir los ojos vi que estaba acorralando a Leiza, eso no lo iba a tolerar y me enfurecí, extendí mis garras, me levanté, corrí hacia él y me lancé sobre él, quitándoselo a Leiza de encima. Y los dos volvimos a luchar, pero esta vez eea yo el que iba ganando, en eso lo llevé hacia un barranco que había alli cerca y lo tiré por alli, me asomé rápidamente y vi que no había sobrevivido, me senti muy aliviado, y regresé con Leiza.

*-¿Estás bien?, será mejor regresar- dije*

*-Lo único que quiero es que tú estés a salvo- dije mientras caminaba de regreso- Solo te necesito a ti y lo que el tiempo quiera darnos*

Después de decir eso le di un beso, en eso hice una mueca dolor, no me dolían las heridas, pero me dolía el golpe que me acababa de dar en la pata con una roca del suelo, en eso le dirigí una mirada de pocos amigos a la roca.

El león que se no acercó era mi padre, pero como era de noche parecía otro león, éste al verme con algunas herids me preguntó que si me había peleado con una mata de espinas, así que le conté lo sucedido y puso una cara de pocos amigos y nos contó que era probable que los amigos de Rash estuvieran planeando algo para matarme.

*-Pues buena suerte para hacerlo- dije- Si intentan hacerme daño las llevan claras*

En eso mi padre me contó que solo eran los machos los que querían echarme, las hembras ya me habían aceptado, me costó, pero pillé la indirecta.

quede impactada ante lo que había dicho el padre shiro que los amigos de rash querían matarlo

pues yo no los voy a dejar, si es necesario luchare para ayudarte, no me gustaría perderte, ven sera mejor que vallas a descansar


sentí como el odio de esos leones que, querían arrancarlo de mi lado me consumiera, lo único que deseaba era que lo dejaran tranquilo, y que olvidaran el pasado, pero eso seria imposible

*-No te preocupes cariño, mañana les tengo una sorpresa- dije con carade planeando algo
-Ahora será mejor que vayamos a dormir*

Tras decir eso subimos la montaña, entramos a la cueva y nos disponíamos a dormir cuando mi padre nos dijo que podíamos dormir en la gran roca del centro, ya que esa era la roca donde dormían los reyes, me costó, pero acabé accediendo.

*-Buenas noches mi reina- dije dándole un beso*

*buenas noches, amor* dije acariciándole la melena. Después de eso me quede dormida aunque algo intrigada por lo que nos tenia que decir. Bueno mientras mas pronto me duermas mejor.
Cerre los ojos pero cuando por fin estaba quedando dormida la imagen de mi reflejo del lago regreso. Me desperte, me pregunto por que me preocupa tanto,si ya tengo todo, pensé.
Después de verme calmado volví a dormí.
A la mañana siguiente me desperte y vi hermoso amanecer...

Cuando me desperté vi que Leiza estaba ya despierta y estaba contemplando el amanecer , en eso me acerqué a ella y le di un beso.

*-Buenos días, mi reina, ¿has dormido bien?- dije*

Justo después de preguntarle eso llegó un pájaro que me hizo una señal.

*-Lo siento amor mío, tengo que irme- dije-Espero que te vaya muy bien loderando la caza de hoy*

Tras decir eso entré a la cueva, desperté a mi padre y los dos nos fuimos siguiendo al ave.

Respire hondo estaba nerviosa, creo que no servire como reina,en eso se me acerco un cachorro,me saludo algo adormilado.

*je creo que alguien sige con mucho sueño*
dije mientras el pequeño asentía
*por cierto como te llamas pequeño?*
El cachorro iba a decirme su nombre cuando una leonas se me acerco y si mostrarme respeto alguno me dijo que yo no debería ser la reina, ni siquiera la lider, que si fuera la reina ya nos habría dicho quienes irían a la partida de caza.

*bien una de las que ira, vas a ser tu*

Después de eso elegí a unas cuantas mas para que cuando llegaran los chico ya hubiera algo para desayunar. El resto de las leones se quedaron a vigilar,incluyendo el pequeño que insitia en venir.
Después de una caza exitosa llevamos a las presas a la cueva hay las leonas se comieron dos ñus y los otros dos para el rey y para el antiguo rey, todas comían excepto yo, que no tenia nada de hambre

Después de una caminata llegamos a donde habían varios leones esperando, éstos eran los amigos Rash, reuní a todos los que querían matarme.

*-Ahora que estais todos aquí, estais desterrados- dije sonriendo siniestramente- Nadie que intente matarme se saldrá con la suya, ¡ahora!*

Tras decir eso, varios cocodrilos y chacales los atacaron.

*-Caísteis en nuestra trampa- dije*

Ya no iban a molestar más, les di las gracias a ambos grupos de animales y lo dos nos fuimos a vigilar el reino. Cuando nos entró hambre regresamos a la cueva para ver si habían traído comida, al llegar vimos que teniamos un ñu para cada uno, iba a comer cuando vi que Leiza no comía, así que me acerqué a ella.

*-Cariño, ¿qué te ocurre?- dije preocupado*

Anda en las nubes cuando la voz de shiro me regreso a la tierra.

*eh no nada...* le dije con ternura *solo andaba pensando,y no te preocupes por mi estoy bien, adelante come*

Le dije y seguí pensando,no quería preocuparlo asi que debía cambiar de actitud en eso llego el cachorro y me dijo que si jugábamos a las luchas

*claro...pero creo que voy a perder.*

No me convenció del todo, pero al verla jugar con el pequeñajo me relajé y fui a comer, no tardé en comerme el ñu y dejé algo para dárselo a una leona vieja, ésta me lo agradeció, pero en ningún momento me dirigió la mirada. En eso me puse a pensar si es que nunca me iba a ganar su confianza. Para distraerme decidí ver como iban Leiza y el pequeño, no podía evitar reirme, mi esposa era muy mala luchando y acabó perdiendo, en eso me acerqué a ella y le di un beso de consolación.

*-No te preocupes, no es necesario que sepas luchar, pero si quieres te puedo enseñar- dije sonriendo*

*jejeje* me reí ante su comentario *jaja claro esta bien, maestro, ahora me puede enseñar a pelear* le dije mientras que el cachorro. No veo y nos dijo que eramos una bonita pareja. Me alegra ante el comentario del pequeño,hasta que le dije
*gracias,...*
No me dejo terminar por que el me volvió a vencer y me dice GANE,gane soy el mejor dijo aun arriba de mi
Me reí y le dije
*si que lo eres, bueno sigamos jugando pequeño*
Desvie mi mirada hacia shiro
*no quieres jugar un rato shiro?*

-No, no, prefiero no hacerlo, ya que si lo hago se me acaba la diversión- dije riéndome

Tras decir eso me eché en el suelo y vi como Leiza perdía una y otra vez, sin duda necesitaba clases. Iba a seguir viéndolos cuando el pájaro regresó, como me había servido de ayuda tantas veces decidí darle el título de mayordomo, pero antes tendría que saber su nombre.

-Oe, ya me has ayudado varias veces, pero aún no me has dicho tu nombre- dije

En eso me dijo que se llamaba Zuzó, la verdad, casi me descojono del nombre del pájaro, es que era muy raro.

-Bueno Zuzó, ¿qué te parece ser mi mayordomo?- dije

Él me dijo que sería todo un honor, por lo que le nombré el mayordomo real, después de eso me dijo que había problemas con las gacelas y los antílopes, por lo que tuve que marcharme, esta vez me fui sin mi padre.

Seguimos jugando cuando varias leonas se nos acercaron una de ellas erala madre de shirl que vino para llevárselo ya que no iba a bañar. Cuando estaba por darme la vuelta ellas me rodearon

*amm en que les puedo ayudar?*

Dije mostrándome segura ante ellas aunque por dentro me estaban asustando.
Una de ellas se burlo de mi diciendo que era una débil mientras que todas reian la misma que me había dicho lo anterior empezó a decirme que yo no debería ser la reina, que era solo una buena para nada. Eso me hizo enfurecer tanto que me abalanze contra ella y empezamos a luchar en eso llego el padre de shiro y nos separo le pido a las leonas que me dejaran en paz y que se largaran. Me pregunto si estaba bien.

*si, muchas gracias*

Dije me di la vuelta y salí corriendo estaba triste lleve a pensar que nadie me quería como su reina... Lleve hasta upendi y hay me quede

Por suerte el problema de las gacelas con los antílopes no era nada grave y por tanto tenía fácil solución, así que tras arreglarlo regresé a casa. Una vez allí me extrañó no ver a Leiza.

-Oe, ¿alguien a visto a Leiza?- dije preocupado

En eso algunas dijeron que la patética reina se fue llorando de allí, al oír eso me enfadé, miré a mi padre y él me contó lo sucedido, lo que hizo que me enfadará más.

-¿Quién empezó?- pregunté sacando las garras y mostrando los dientes

Ninguna se atrevió a responder, así que miré a mi padre, éste me dijo que fue la madre del cachorro, el resto la siguieron.

-Grrr, por ser madre te perdono la vida- dije enfadado- Pero la próxima vez que a alguna de vosotras se os ocurra meteros con vuestra reina, ¡la pagaréis caro!

Tras decir eso rugí con todas mis fuerzas, para que quedara bien claro que no iba de farol, después me marché de allí, fui a buscar a Leiza.

-Piensa Shiro, ¿dónde puede estar?, ¿no conoce muchos sitios de Mountain Lands, así que dónde estará?- dije

En eso pensé que podía estar en nuestro segundo Upendi, así que fui para allá, me sentí muy aliviado al verla allí, pensé animarla, así que me acerqué sigilosamente y la tiré al agua.

-Jajaja, es mi revancha por lo de ayer- dije riéndome
-Dime, ¿estás mejor?, mi padre me contó lo sucedido- dije- Ya he puesto firmes a esas leonas, y tú no les hagas caso, siempre han sido así de tontas

Después de tirarme al lago de un modo que yo diría juguetón me reí y me sacudi para asi mojarlo tantito

*si gracias necesita que alguien me animara y me algra que hayas sido tu* salí del lago, le di un beso y le acaricie la melena

*la verdad dudo que valla a ser una gran reina, lo único que queria era que el cachorro se riera un poco ya que es el único de su edad, bueno que te parece si empezamos con la leccion*

-No digas eso, estoy seguro de que serás una gran reina, los dos seremos unos grandes reyes juntos- dije sonriendo- Y venga, comencemos

Tras decir eso caminé hacia un gigantesco cristal.

-Extiende tus garras y golpea el cristal con todas tus fuerzas hasta que lo hayas hecho pedazos no pares- dije